Saltos, aleteos y siseos
El sisón tiene un plumaje pardo, poco llamativo, para camuflarse en los campos de cereal y los pastizales secos. En primavera, los machos mudan sus plumas para adquirir una vistosa combinación blanca y negra, visible a gran distancia. Con su traje de gala, se desplazan a cantaderos tradicionales, siempre los mismos, para desarrollar el cortejo nupcial, quizás el rasgo más llamativo en esta especie.
En el cortejo se combinan patadas en el suelo, inconfundibles reclamos y saltos con aleteos que generan un característico siseo. Dicho siseo, debido a la existencia de una pluma más corta entre las del extremo del ala, se deja oír también en las aves en vuelo y explica el nombre en castellano de la especie, denominada parecidamente sisó en catalán y sisão en portugués.