¿Qué hacer si me encuentro un vencejo?
En la puerta de casa, en la calle, en las redes sociales, en WhatsApp… en estos días va a ser difícil que no nos topemos, real o virtualmente, con una cría de vencejo que ha caído de su nido antes de tiempo. A veces algunas crías motivadas por un exceso de curiosidad y temeridad se asoman en exceso al exterior produciéndose el accidente, pero fundamentalmente las aves caen del nido al verse obligadas a saltar por el calor sofocante que se alcanza en su interior.
Estos vencejos caídos en el suelo están condenados a morir, por lo que es urgente intentar ayudarlos. La primera opción a contemplar siempre debe ser trasladarlos a un Centro de Recuperación para que sean cuidados por profesionales. Pero pueden existir situaciones en las que esta opción resulte imposible o que incluso por saturación los Centros no puedan aceptar más aves. En este caso podemos sentir el impulso de intentar criar el vencejo nosotros mismos, pero los vencejos son aves muy especiales, que requieren unos cuidados igualmente especiales, y sobre todo un gran esfuerzo y dedicación para que el joven ave tenga posibilidades de desarrollarse de forma óptima y con posibilidades de sobrevivir en libertad.
Este texto debe servir para descubrir si seréis capaces de ofrecer los cuidados que necesita un vencejo y saber cómo hacerlo de la mejor manera posible.
AVISO: Si encuentras un ave que necesita ayuda la mejor opción siempre es llevarla a un centro de recuperación. La tenencia de aves silvestres no está permitida por la legislación vigente y nos podemos enfrentar a una sanción si nos la llevamos a casa. En el caso de sospechar que se trata de un ave amenazada, no debemos cogerla bajo ningún concepto, debiendo avisar inmediatamente a los agentes forestales o medioambientales (a través del 112) para que se hagan cargo de ella.
A pesar de lo anterior, la realidad es que todos los años cientos o quizá miles de vencejos son criados a mano por personas no especializadas, incurriendo frecuentemente en errores -por la falta de información- en los cuidados del ave que imposibilitan o dificultan su recuperación. Ahorremos al menos a esos vencejos “duchas refrescantes”, dietas a base de carne de pollo, o incluso de galletas…
Primeros pasos: ¿Qué le pasa?
- Coger al vencejo con cuidado pero con firmeza, no dejarle “espacio” para que forcejee en la mano, pues en ese proceso sus plumas se deterioran mucho. ¡No os asustéis! Se aferrará con firmeza a vuestra mano con sus garras; pero en ningún caso os hará ninguna herida ni nada parecido.
- Asegurarnos de que lo que hemos encontrado es un vencejo joven (e ileso) y no un adulto lesionado (a veces los adultos se golpean al intentar acceder al nido y caen aturdidos al suelo). La forma de saber si el vencejo que tenemos en la mano puede volar (adulto) o no es simple, colocaremos la mano que sujeta al vencejo a la altura de nuestro rostro en un entorno en el que el ave tenga espacio para volar (espacio amplio, pues puede que le cueste ganar altura), y simplemente abriremos la mano. Un vencejo adulto sano saldrá volando, un adulto lesionado probablemente intentará volar sin éxito, y si es una cría se quedará aferrada a nuestra mano para no caerse. En ningún caso intentaremos que el vencejo vuele lanzándolo hacia arriba o dejándolo caer desde una altura mayor a nuestro rostro.
Si el vencejo presenta alguna lesión de consideración, como un ala fracturada, lo más probable es que deba ser sacrificado, y desde luego va a ser imposible que nosotros podamos ayudarlo, así que estos ejemplares deben ir sí o sí a un centro de recuperación para que evacuen su lesión.
3. Guardar el vencejo en una caja (una de zapatos con unos orificios en la tapa sirve perfectamente) con un papel absorbente en su interior.
Cosas que NUNCA deberemos hacer
- Aunque haga calor y el pequeño vencejo parezca sofocado: Nunca lo remojaremos para refrescarlo… Esto puede matarlo a las pocas horas.
- Nunca sumerjamos su pico para darle de beber, si entra agua por sus narinas (orificios sobre el pico por los que respira) el agua penetrará en su sistema respiratorio y lo más probable es que tenga una dolorosa muerte por neumonía.
- No debemos darle de comer lo primero que encontremos aunque muestre señales de hambre. Los vencejos están adaptados para pasar varios días sin comer, así que lo normal es que unas horas e incluso un día sin comer no le hagan mucho daño, pero una comida inadecuada sí.
Comida: Insectos y solo insectos
Para saber mucho más te aconsejamos que te leas este PDF este PDF “protocolo de cría” de la web falciotnegre.com dedicada en exclusiva al vencejo: en su sección “cría a mano” encontraréis muchísima información, además de imágenes ilustrativas de cada paso (estimar la edad de un vencejo, como sujetarlo para alimentarlo,…).