El alcotán y la libélula.
Su esbelta silueta hace del alcotán europeo uno de los más elegantes, aunque se le podría confundir con algunos ejemplares de dos insignes parientes; el halcón de Eleonora y el cernícalo patirrojo.
De punta de pico a punta de cola, el alcotán europeo mide entre 28 y 36 cm, con una envergadura máxima – de punta a punta de ala – de 84 cm. Frecuenta espacios abiertos, arboledas poco densas, sabana y estepa con algunos árboles, entornos de humedal, límites de bosques… No es raro que visite los suburbios urbanos. Generalmente prefiere las altitudes modestas, aunque en la India se le ha visto a 4000 m.s.n.m.
Siendo una rapaz migratoria, desde sus cuarteles africanos se ríe del invierno. En nuestras latitudes, aparece en primavera y se marcha en otoño. Es famosa su dedicación a la caza de libélulas y otros grandes insectos voladores que se zampa mientras planea.
Sin embargo, sobre todo en época de cría, también captura paseriformes tales como golondrinas, vencejos, gorriones, bisbitas, pinzones, alondras y estorninos. En los alrededores de Londres se ha aficionado a las cotorras de Kramer que, a pesar de su tamaño, deben ser una presa fácil para este ágil cazador. Localmente se alimenta de murciélagos. Prefiere capturar a sus presas en el aire y de ahí que lagartos y roedores rara vez formen parte de su dieta.
Foto y textos de Jauma Soler. Grupo local SEO-Barcelona